
MANNY RAMIREZ ya esta con los Medias Blancas de Chicago. Reclamado de Waivers después que los Dodgers lo colocaron ahí y donde ahora Chicago se responsabiliza por el lo que queda de su salario en este ano que es alrededor de 3.800.000 dólares.
Sin duda Ramírez es un jugador importante dentro de cualquier alineación. Tiene poder, batea con consistencia y ha sido la pesadilla de muchos pitcher a través de los anos. De que batea, batea..
Pero el problema no reside ahí. La única razón para Chicago en obtenerlo es que tiene aspiraciones aun de llegar a los Play off, que no parece imposible, aunque Minnesota luce solido en la punta de la división central de la Liga Americana.
Kenny Williams, gerente de los patiblancos, se reunió con su personal para llegar a un consenso de la adquisición de Manny y por supuesto que fue aceptado. E l puede ayudar.
Los problemas de Ramírez van mas allá de su desempeño en el campo de juego. Por un lado tuvo una suspensión de 50 juegos cuando salió positivo en sustancia prohibida por las Grandes Ligas. En su ultima aparición al plato con Los Ángeles, fue expulsado después de reclamar en el único pitcheo que vio en el partido y siempre es una incógnita en como es su relación con los compañeros de equipo.
OZZIE GUILLEN que parece que aun no se ha quitado el uniforme de jugador y puesto el de manager, dice que no tiene problemas con el slugger, que el solo espera que rinda y que Manny sea Manny. Eso quiere decir sus excentricidades y manera de actuar.
Pero existen ciertas reglas en Chicago, no solo en el uso del uniforme sino también en reglas internas impuestas por el mismo Guillen como es la de escuchar el himno de los Estados Unidos en el terreno antes de los partidos y calentar con los compañeros, situación que Ramírez no acostumbra.
Guillen dice que si Ramírez produce no le importa si sale al campo desnudo. Lo que contradice lo de las reglas internas, porque si rinde así no caliente con el conjunto y no este en el terreno para escuchar el himno, porque no ha de importar entonces el correcto uso del uniforme al cual se le debe respeto. Eso es precisamente no tener las riendas del equipo, porque si Ramírez puede hacer lo que le de la gana con respecto al uniforme, los jugadores querrán el mismo derecho o se sentirán aislados por eso tratamiento especial; y ahí amigos comienzan los problemas.
Vivimos en un mundo de normas que son aplicadas al deporte también. Ningún jugador esta sobre el club ni sobre el juego como tal.
Admiro a Ramírez como jugador, le cae bien la Liga Americana porque será usado generalmente como bateador designado, ya que el mismo dice que se cansa mucho jugando también en el campo de juego como jardinero. Los Medias Blancas definitivamente lo necesitan para sus aspiraciones de poder estar en la post temporada.
Los resultados dirán si valió la pena, los casi 4 millones de dólares que le pagaran por este dos meses que restan de temporada.
MIKE FLORES




