ROBERTO ALOMAR, EXHALTADO A LA INMORTALIDAD EN COOPERSTOWN
Es el tercer puertorriqueño en llegar al Salón de la Fama
Nacido en Salinas, Puerto Rico; fue considerado el mejor jugador de su época, ganó 10 Guantes de Oro, participó en 12 Juegos de Estrellas y obtuvo dos anillos de Serie Mundial. Esta entre los mejores segunda base de la historia y su puesto en el Salón de la Fama es más que merecido.
En el seno de una familia de jugadores, su padre Sandy Sr. Jugó 15 años en las ligas mayores en el cuadro interior y su hermano Sandy Jr., fue un destacadísimo receptor por espacio de 19 temporadas. Ambos a su vez participaron en Juegos de Estrellas.
Debuto en 1988 con los Padres de San Diego y su último partido fue en el 2004 como miembro de los Medias Blancas de Chicago, dejando un total de 2,724 hits con 474 bases robadas, 210 jonrones y un promedio de bateo de .300 exactos. Sus 10 Guantes de Oro son la mayor cantidad para un jugador de la segunda base en la historia.
Roberto Alomar dentro de su apretada agenda y con tono de emoción por su exaltación al Salón de la Fama nos concedió una entrevista mientras viajaba de costa a costa en su querida Isla.
Como te sentiste después que los Padres te cambiaron a Toronto,luego de haberte desarrollado como jugador en su sistema de ligas menores ?
RA: Me hice jugador con los Padres y ellos me llevaron a las Grandes Ligas y estoy agradecido profundamente con la organización, aunque mi consagración como jugador vino después con los Azulejos
Detrás del aura y su imagen, como fue jugar con los Orioles al lado de Cal Ripken?
RA: Tuve la fortuna de jugar con Ripken, que tiene grandes atributos y liderazgo en el juego, es quizás una de las personas mas inteligente con que yo haya jugado. Como en mi caso proviene de una familia de peloteros, su padre fue manager y su hermano también jugó.
Podrán los Azulejos capturar de nuevo la adoración de la ciudad, igual cuando el equipo donde tu jugabas logró ganar dos Series Mundiales?
RA: Yo pienso que si, el sistema de ligas menores está sacando buenos frutos, los Azulejos están en una división llena de equipos difíciles, pero tienen sobre todo muy buen pitcheo, tengo fe que los aficionados llenaran de nuevo las tribunas.
Que ha cambiado para los jugadores latinoamericanos en los últimos 20 años en las Grandes Ligas?
RA: EL cambio no ha sido tan grande, el jugador latino tiene que esforzarse mucho, trabajar extra y ganarse el puesto, la meta es no desistir.
Además de tu padre que jugó en Grandes Ligas por 15 años, quien ejerció mayor influencia en tu carrera?
RA: Definitivamente tuve una gran fortuna en que mi padre juagara Grandes Ligas, rodearme de jugadores, oír consejos, aunque tengo que decir que mi madre fue esa piedra de apoyo, siempre dispuesta a estar para mi, señalarme el buen camino y dejar que jugara el beisbol. De los jugadores que mas admire y observaba mucho fue a José “Cheo” Cruz, se puede decir que era mi ídolo.
De los shortstops que te acompañaron al lado del segunda almohadilla para ejecutar los doble plays, con quien te sentiste mas cómodo durante tu trayectoria ?
RA: Para mi que llegue a jugar con muy buenos campocortos, tengo que decir que Omar Vizquel mientras estuve con Cleveland ha sido el mejor con quien realicé esta jugada. Fue una verdadera fortuna, es increíble verlo jugar.
Que necesita un jugador para poder destacarse y llegar al Salón de la Fama?
RA: Mucho trabajo, mucha dedicación, humildad, observar otros jugadores para buscar la excelencia, constancia y no desmayar, creer en uno mismo.
Cuán importante es para un jugador latino, jugar en sus respectivas ligas invernales?
RA: En mi caso a mi me ayudo mucho, llegaba listo para los entrenamientos de primavera, me ayudó a pensar, a ser mejor pelotero.
Cómo es jugar con tu propio hermano en un mismo equipo de Grandes Ligas?
RA: Eso fue un sueño hecho realidad, yo jugaba con Sandy desde las pequeñas ligas, luego en el profesional, siempre hablábamos de poder jugar juntos en liga grande y lo hicimos dos veces, primero con Cleveland y posteriormente con los Medias Blancas de Chicago, también en un Juego de Estrellas, fue inolvidable para nosotros.
Eres el tercer puertorriqueño en el Salón de La Fama, al lado de Roberto Clemente y Orlando Cepeda…..
RA: Para mi es un gran honor compartir mi nombre con estas dos leyendas del beisbol, es un honor por mi país y espero que habrá mas puertas para otros latinos que merezcan llegar.
Se habla mucho de tu bate y tu defensa, pero robaste mas de 30 bases en ocho temporadas, cuán importante era la velocidad para ti?
RA: Yo disfruté todas las partes del juego, trabaje en todos los fundamentos del juego, para mi era tan importante robarme una base como dar un hit, intimidar al contrario, ponerme en posición anotadora. Los secretos de cómo robar una base lo aprendí de mi padre, que fue un excelente robador.
Tu padre jugo en Nueva York, un publico muy exigente, el te hablo alguna vez de esto antes de llegar a los Mets?
RA: Aunque considero el publico de Nueva York muy amigable, definitivamente es una fanaticada exigente como en casi todos los estadios, pero en Nueva York hay que ganar, uno es susceptible a los abucheos, pero eso es algo que como jugador tienes que superar y seguir dando lo mejor de ti.
De los lanzadores que te enfrentaste, cual consideras el mas difícil?
RA: Hubo muchos, podría nombrarte a Pedro Martínez, Roger Clemens, la fortaleza de Nolan Ryan es increíble, también considero difícil a Fernando Valenzuela y Dwight Gooden.
Entras al Salón de la Fama con una gorra de los Azulejos de Toronto….
RA: Gane dos Series Mundiales con los Azulejos, jugué para la organización por 5 años, quiero mucho a la ciudad, es un honor entrar al Salón con la gorra de Toronto.
Desde que debutaste en 1988 hasta hoy, ha variado el beisbol en algo?
RA: El juego como tal no ha cambiado, lo que si ha cambiado son los parques, ahora son mas pequeños y se batean mas jonrones.
Cual puedes decir que fue el momento mas difícil de tu carrera?
RA: Jugando para Arizona, me dieron un pelotazo que me fracturo la mano derecha, fue muy difícil para mi tener que salir por un tiempo de los campos de juego; pero tengo que decir que mi carrera ha sido llena de muchas alegrías, de gratos momentos. Dios me dio talento para jugar y no lo cambiaria por nada.
Es difícil después de 17 años, tener que decir adiós y pasar al retiro como jugador?
RA: Después de estar acostumbrado de hacer esto todos los días, es triste saber que no lo harás más, aunque yo tenia muy claro que si llegaba el día que ya no podía jugar como yo podía y quería, tenia que retirarme.
Cuál es el futuro de Roberto Alomar?
RA: Seguir estar envuelto en el beisbol, ayudando a los muchachos jóvenes que se vienen formando en la organización de Toronto, utilizar mi experiencia en todo lo que pueda con los jugadores que tengan ese sueño de llegar a las Grandes Ligas.
MIKE FLORES